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Llevo más de 17 años trabajando en este entorno donde comencé como guía y me enamoré de la vida en la sabana, no sólo por poder disfrutar como espectador de primera clase de la naturaleza salvaje, sino por el "ambiente familiar" que se respira entre el personal de los que aquí trabajamos y que sin duda se traslada a la experiencia del huésped. Me enorgullezco de formar parte del equipo de Sabi Sabi y de su filosofía "We care” (Nos preocupamos por ti). Tan unido estoy a esta tierra que he criado a mi hijo aquí. Ahora con 13 años, el joven sigue mis pasos y se está convirtiendo en un entusiasta de la fotografía. Además de disfrutar de un buen safari, en mi tiempo libre, me encanta relajarme con un libro y una buena copa de vino sudafricano.
Viajar a Sudáfrica ofrece una inigualable oportunidad de disfrutar de un safari en alguna de sus espectaculares reservas privadas. La reserva privada de Sabi Sabi es de sobra conocida por su biodiversidad, un hábitat que alberga innumerables especies que forman parte del área de conservación del Gran Parque Nacional Kruger, lo que permite un flujo ininterrumpido de animales entre la reserva y el parque.
Nos consideramos extremadamente afortunados, pues la experiencia que nos dan los más de cuarenta años de existencia de la reserva nos permite acercarnos a los animales de forma que no asocien nuestra presencia con el estrés o la incomodidad. Los safaris en esta reserva privada sudafricana se realizan en vehículos abiertos 4x4, lo que además nos da la oportunidad de ir campo a través en la sabana africana. A todo nuestro equipo de rangers y rastreadores “shangaan” les mueve la pasión por la vida salvaje y la naturaleza y su trabajo consiste en interpretarla de forma intuitiva y tratar de comunicar el importante papel que desempeñamos en el entorno que nos rodea, sin interferir en él, siendo meros observadores y dejando que la naturaleza siga su curso.
Recientemente hemos avistado dos nuevos cachorros de leopardo en la reserva que están afanados aprendiendo a trepar a los árboles con agilidad y a convertirse en sigilosos cazadores bajo la atenta mirada de su madre, parte de nuestro protocolo de safari consiste en dejarles espacio para que se acostumbren a su entorno antes de permitir a los vehículos acercase a ellos.
Como guardianes de la sabana en Sudáfrica, nuestra responsabilidad está profundamente arraigada en la preservación del medioambiente y el respeto por nuestro frágil ecosistema, la mejora de la comunidad, de donde provienen la mayoría de los empleados, y nuestro firme compromiso con el ecoturismo sostenible.
El safari como lo planteamos consiste en perderse en el momento, absorber lo que se está viviendo y saber que se está contribuyendo a algo increíblemente especial en apoyo del turismo y de un futuro sostenible. Hacer un safari en Sudáfrica no se trata solo de avistar los 5 grandes, sino también de descubrir las pequeñas cosas. Un safari guiado a pie puede descubriros un mundo completamente nuevo, ya que el suelo que pisamos cobra literalmente vida mientras examinamos la vegetación, los insectos, las minúsculas arañas, los pájaros y las ranas. Nos convertimos en parte del paisaje y nos hace comprender que somos parte de algo increíble que debemos proteger para disfrute de generaciones futuras.
La filosofía tras el lema de Sabi Sabi “Ayer, hoy y mañana" nos sirve de recordatorio constante para conservar las áreas silvestres, que están disminuyendo rápidamente y proporcionar un santuario para la fauna y la flora como parte del patrimonio de Sudáfrica.
Nuestros cuatro lodges son un ejemplo más donde la construcción es sostenible, la vegetación y la vida salvaje conviven armónicamente con el confort del lujo distendido y donde la cálida hospitalidad sudafricana está siempre presente. Un concepto de viaje que encaja perfectamente con el modelo que sustenta a Icárion y sus viajes. Incluso dentro de los lodges son frecuentes los encuentros con la vida salvaje, y disfrutar del café de la mañana o de una buena copa de vino bajo el atardecer en la sabana mientras una manada de elefantes sacia su sed en la laguna frente a la terraza del lodge.
Estos son los recuerdos que queremos que te lleves en la retina y en el corazón y que con total seguridad te harán querer volver a visitarnos.
¡Estoy deseando daros la bienvenida personalmente a Sabi Sabi!