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Avistamiento de ballenas sostenible en Islandia

Belen-Garcia

Belén García, Bióloga marina, marinera y guía de naturaleza en North Sailing

junio 2021

Belén ha dedicado más de 8 años a estudiar los océanos. A lo largo de su carrera profesional, Belén ha participado y liderado diferentes proyectos de conservación marina y ciencia cívica. Después de realizar su Máster en Gestión de Costas y Recursos Marinos, zarpó en varias expediciones oceánicas como guía turística y educadora ambiental. Después, se especializó en el campo de la acústica marina, desarrollando su propio estudio en relación con ruidos de embarcaciones y posibles impactos en cetáceos en Islandia. Desde el 2019, Belén es también fundadora y directora de la ONG “Ocean Missions” en Húsavík, Islandia, cuya misión es inspirar al mundo para salvar los océanos.

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Algo mágico ocurre cuando ves un animal salvaje de cerca, especialmente, ¡si se trata de un animal del tamaño de un bus! Unos gritan, otros lloran de emoción y otros, quizás nerviosos, mantienen la mirada detrás del objetivo para capturar ese momento para siempre. Las ballenas siempre nos han fascinado. Ver una ballena por primera vez, es una experiencia que nunca se olvida. Sin embargo, generalmente las mejores experiencias no ocurren cuanto más nos acercamos al animal sino cuando más actuamos desde el respeto y la admiración…

Los únicos barcos eléctricos en Islandia están en Húsavík

Avistar ballenas desde un barco eléctrico es una experiencia única y emotiva, y más cuando se trata de un sitio tan especial y lleno de vida como la bahía de Skjálfandi en Húsavík. Desde 2015, North Sailing ofrece eco-friendly tours en los únicos barcos eléctricos que existen en Islandia: Andvari y Opál. En su ambición por convertirse en líderes del turismo responsable en Islandia, en North Sailing, optaron por la energía sostenible y por ello reemplazaron los motores convencionales por baterías, en dos de sus embarcaciones.

El silencio, una herramienta clave para respetar, entender y conectar los océanos

El uso de baterías en barcos eléctricos supone ventajas directas para el medio ambiente ya de que reduce significativamente el ruido submarino y totalmente, las emisiones de CO2, que tanto suponen un problema directo para nuestro planeta. Además, la exaltación del cliente se amplifica positivamente, ya que el hecho de estar completamente en silencio permite conectar mucho más con el medio marino y entender el ambiente acústico natural que de otra manera, no seríamos capaces de percibir debido al ruido de los motores. Muchas veces cuando viajamos, anhelamos el sentimiento de paz, queremos pararlo todo, respirar profundo y observar con detenimiento lo que nos rodea para poder sentir el “Aquí” y el “Ahora”. Esto, es exactamente lo que ocurre cuando te embarcas en un barco eléctrico y sales al mar.

Educar y cuidar lo que amamos es fundamental

Entender como el silencio en el mar es completamente necesario para la vida marina puede ser una herramienta muy útil para educar a los turistas sobre el problema de la contaminación acústica para nuestras ballenas, delfines y el resto de vida marina. Nuestros océanos se enfrentan a un alarmante ruido constante debido fundamentalmente a la pesca, el transporte marítimo y las infraestructuras, haciendo que los océanos modernos sean mucho más ruidosos que nunca. El ruido puede crear estrés y alteración de funciones vitales en organismos marinos. Por ejemplo, las ballenas y delfines son animales altamente acústicos que utilizan el sonido como medio principal para comunicarse y relacionarse.

Por esta razón, es imprescindible que las empresas de avistamiento de cetáceos incluyan el ruido en sus políticas ambientales y que aspiren a reducir el ruido en la media de lo posible. Esto se puede alcanzar nos solo con la transición a barcos eléctricos, pero también reduciendo la velocidad, evitando maniobras innecesarias, reduciendo el número de barcos, etc.

Siguientes pasos para la sostenibilidad

Existen muchas opciones que se pueden implementar para mejorar, tanto individualmente como a nivel empresarial para reducir nuestra huella ambiental y contribuir para recuperar unos mares sanos. En North Sailing, seguimos el código de conducta para avistamiento de cetáceos, guías voluntarias que se implementaron en 2015, por “Ice Whale”. Este documento oficial sirve como guía para implementar las mejores prácticas para esta actividad en Islandia y está dedicada principalmente a los guías y capitanes de las embarcaciones. Porque creemos que cuidar de nuestros mares y actuar de forma responsable no es una opción sino una obligación, en North Sailing, hemos querido ir más allá y adoptar el nuevo certificado ambiental impulsado por World Cetacean Alliance (WCA) con el objetivo de aumentar nuestro compromiso con los océanos, el bienestar de las ballenas y nuestros ecosistemas marinos.

Devolver a la naturaleza, la nueva normalidad

Son muchos los desafíos ambientales a los que se enfrenta el planeta y la humanidad incluido la globalización y el turismo masivo. Sin embargo, ahora que nos adentramos en la fase post COVID tenemos una oportunidad única para reflexionar y mejorar, optando por un turismo más sano y en harmonía con la naturaleza. Por tanto, es imprescindible que el sector turístico se comprometa a devolver de alguna manera a la naturaleza lo que le hemos estado "quitando" durante muchos años de turismo masivo sin pensar demasiado en las consecuencias. En North Sailing, promovemos el concepto de "slow travel"; viajar sin prisas, disfrutar, comprometerte con el lugar y su gente y dejar una huella positiva. Conceptos que encajan con la filosofía de Icárion y de su matriz Iberostar en su compromiso con las políticas de circularidad que impulsan con el movimiento Wave of Change para la protección del medio ambiente y los océanos.

No estamos solos, la importancia de colaborar

Parte del éxito hacia un turismo de naturaleza responsable, reside en colaborar con institutos científicos y organizaciones que se dedican específicamente a estudiar y cuidar de los océanos. A nivel local, North Sailing colabora activamente con el Centro de Investigación de Húsavík y con "Ocean Missions" ONG, para la realización de proyectos de ciencia cívica, expediciones en Islandia e investigación de la contaminación por micro plásticos en los mares de Islandia

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